Muy buenas a todos. Este fin de semana nos reunimos unos cuantos amigos para despedir con una barbacoa (made in Spain) a José Costal que se marcha a Lisboa previo paso por su casa en Galicia. Lo pasamos como se merecía la ocasión, muy bien. Y es que Jose es una de esas personas por las que merece la pena pasar por este mundo. Es una de esas personas que se puede catalogar de "buenas", y es que siempre tiene una sonrisa en los labios, es un tipo humilde con unas aptitudes físicas de una gran calidad (y no por eso actúa de una manera altiva). Me siento orgulloso de haber compartido entrenos con él, y tiene parte de culpa de que yo tenga una ilusión tan grande por este deporte. Se que lo vamos a echar mucho de menos en estas tierras, y tambien se que pasará el tiempo y todavía le contaré a mis hijos (y lo hablaré en las cenas con mis hermanos) de lo ANIMAL que era el pequeño gallego ese que devoraba kilómetros de una forma tan fácil.
Gracias por todo Jose, y que tengas mucha suerte en la vida.
Fuerza y valor
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